Hoy seguiré contando las experiencias de Rasmus en
su viaje a San Diego en California. Rasmus es un perro de la raza
Sueco-Danés educado para actuar y rodar películas de cine.
Rasmus tiene muchas ganas de vivir y disfrutar y
desprende mucha energía. Por lo tanto, en seguida al llegar a
Califonia, se fijaba en que los perros que iba viendo por la calle con
sus amos a la correa siempre andaban despacito medio metro detrás del
amo con la cabeza baja y la cola encogida. Suponía que era porque
siempre desde nacer habían tenido que estar con la correa y nunca
habían podido correr. Ni siquiera habían podido desarrollar plenamente
sus músculos. Algunos amos hacían footing con sus perros pero, para el
entender de Rasmus, el aburrimiento tenía que ser el mismo, porque
todavía no había la oportunidad de oler los sitios interesantes en el
camino. Un día se dio cuenta de la gravedad de la depresión de los
perros californienses: la inmensa mayoría estaba castrada o
esterilizada. Iba viendo carteles públicos de carácter fijo indicando
un número de teléfono a donde llamar los amos para conseguir ayuda
para la castración de su perro. En el correo, junto con la publicidad
de las rebajas semanales del supermercado, con intervalos regulares iban
llegando de los veterinarios ofertas de castración y esterilización de
perros, la oferta del mes, ó dos perros tenían más descuento que uno
etc… Cada vez que Rasmus visitaba al veterinario, este se quedaba mas
sorprendido de que estaba “intacto”, como lo llamaba. Hasta en dos
veterinarios diferentes le hacían a misma pregunta a su amo: “No
entiendo como lo ha podido dejar llegar a esta edad sin castrarlo, pero
ahora que está anestesiado sería buen momento para aprovechar y
castrarlo.” Menos mal que Rasmus estaba dormido y no lo escuchaba. De
todas formas, no tenía por que temblar porque su amo seguía opinando
que no. Por cierto, otro incentivo para los dueños de hacer castrar a
sus perros era que el impuesto que se pagaba anualmente por tener a un
perro era mitad para perros castrados/esterilizados de perros todavía
en el estado que habían nacido. Rasmus considera que ya ha visitado a
California, y que es hora de volver. |