La Marxa, 12 enero 2001

Tengo una hija pequeña y está loca con los perros. Le he explicado que no se debe de acercar a los perros que no conoce, pero no hay manera. Por lo tanto me gustaría al menos enseñarle la mejor manera para acercarse a los perros. Qué consejo me puede dar?

Ante todo, lo que está claro es que un perro nacido entre personas, debidamente socializado y integrado en nuestra sociedad y de mente sana a las personas nos considera congéneres. Un perro normal y sano de la cabeza sólo muerde a sus congéneres cuando tiene sus buenas razones. Es un ser vivo altamente social que siempre hará lo mejor para la especie. Como consecuencia, el perro no es un animal ni agresivo ni peligroso.

Enséñele a su hija que los perros son buenos. Pero como hay algunos pocos ejemplares que son malos, antes de acercarse a un perro siempre le tiene que preguntar al propietario si su perro muerde. Los perros tienen un lenguaje propio que es el corporal. Para evitar malos entendidos, su hija siempre tiene que dejar al perro que le huela su mano antes de tocarlo. A ningún perro le gusta ser tocado encima de la cabeza, pero sí en la parte frontal del cuello o sea justo debajo del mentón y en el pecho. Siempre los movimientos tienen que ser tranquilos, nunca bruscos. Además, los perros sienten dolor igual que las personas. Si se le estira de las orejas o de la cola, o si se le toca los ojos le producirá dolor y se quejará. A un perro se le acaricia. Si le tenemos miedo a un perro, el perro no sabe que es a él que tenemos miedo, sólo nota que estamos nerviosos. Este nerviosismo se contagia al perro y él se pondrá nervioso. Los nervios en un perro nunca van bien. Si estamos tranquilos el perro se tranquilizará y se dejará acariciar. Como último, los perros saben cuando se trata de niños, y con ellos aceptarán muchos más errores antes de reaccionar que con una persona mayor. Hay que saber, también, que el gruñido es el aviso de que al perro no le gusta lo que le estamos haciendo y siempre es mejor parar.

 

Contactar con Canix | Kontakt Canix | Contact Canix


© 1997-2008 Canix, 1 rue des Poiriers, 67115 Plobsheim (Strasbourg), France